sábado, 16 de noviembre de 2013

mi futuro no muy lejano / capitulo 1

 Vestidos brillantes, muchas luces, aplausos por montón y sonidos de los flash de las cámaras fotográficas son el recuerdo que tengo del peor momento de mi vida. Segundos que fueron eternos en los cuales lo único que pensaba era en que terminaran rápido, con alguna buena frase que saliera de mi boca, para dar como explicación a mi extraño comportamiento de aquella tarde en la cual los seguidores de la marca habían sido defraudados. Siempre cuando uno quiere que el tiempo pase rápido, no da resultado, siempre pasa lo mismo.  Javier me había dicho “simplemente da lo mejor de ti” y fue la frase aterradora que rondaba en mi cabeza durante toda esas 2 semanas anteriores al desfile. Sí, porque Javier mi jefe en mi nuevo y primer trabajo como diseñadora me había asignado un lugar en el desfile en el mal Plaza Vespucio como la diseñadora a cargo del desfile de Temporada Otoño de nuestra marca. Y, sí, digamos que estaba nerviosa, tenía en mis manos una enorme responsabilidad para demostrar que éramos lo que éramos, como marca de ropa, porque éramos grandes, buenos y originales, por eso no podíamos defraudar a nuestros seguidores, yo no podía defraudarlos y echar a perder, a demás, toda mi carrera como diseñadora.
 Ya había llegado hace 3 meses a la marca, como diseñadora, mis ideas eran buenas, respondía bien a lo que me pedían, los clientes habían creído y confiado en mi y me sentía feliz por eso. Todo me estaba resultando magnífico en esos últimos 3 meses, pero ¿por qué yo? Había muchos diseñadores dentro de la empresa, algunos que llevaban años ahí y muchos eran mejores que yo y con más experiencia. ¿Por qué me eligieron a mí para este desfile entonces? Iban a estar reconocidas personalidades dentro de la moda y el diseño, a demás de la gente como público que eran nuestros seguidores que había que enganchar y no dejar huir. Tenia que aceptarlo y hacer todo lo posible por demostrar mis aptitudes, ya que hasta podría ser que me habían elegido por ser una cara bonita, una joven linda e inteligente, capaz, y no los podría defraudar. Ahora entonces tenía que organizar los nuevos modelos de mi último proyecto de diseños que ya habían sido aprobados por los gerentes y solo faltaba poner manos a la obra. Había que realizarlo de la manera mas original y transmitir la misma sensación que provoca en los consumidores de la marca, esta misma, sin olvidar esta magia y sensación de diversión, habitual en la marca.
 Todo parecía fácil y sencillo hasta llegar al momento de tomar el micrófono y presentar este desfile junto al chispeante animador “Nunca he sido buena para hablar en público y nunca lo seré, menos a esta altura de la vida”, le decía a Javier. El me decía “Es solo la presentación del desfile, dices unas pocas palabras, para hacerlo ver mas profesional, además no eres fea, todo lo contrario, a demás te estamos haciendo un favor, con esto serás famosa por tus diseños, no olvides que son de tu creación, vamos firma y recuerda que no estas sola. Somos un equipo, aparte yo también estaré ahí”. Con esas palabras de apoyo no podía hacer mas que ceder a firmar el contrato de éste nuevo proyecto de “diseñadora y encargada del desfile temporada Otoño femenino” que duraría 2 semanas, en las cuales mis deberes serían organizar el desfile escogiendo los diseños que se modelarán, diseñar la ambientación del escenario, supervisar las obras de instalación, música, las graderías para el publico y   coordinar las entrevistas con los gerentes que darían el sí de aprobación al desfile. A demás debería supervisar el desfile mismo y prepararme yo también para mi entrada al espectáculo, en el cual tendría que decir unas pequeñas palabras al público, luego de ser presentada por el animador. Esto era lo único que me atormentaba en mi labor de éste nuevo proyecto. Yo siempre he sido de las últimas en postular a ser voceros de grupos, en todo tipo de grupos que he participado, desde el colegio a la universidad. Nunca me a gustado, interesado y ni siquiera soy buena para exponer en público, cualquier tipo de tema. Nadie lo sabía, pero yo tenía pánico escénico, que para los que no lo conocen, es cuando da nerviosismo o miedo, que muchas veces puede hacer sentir mal hasta el grado de provocar un desmayo. Éste miedo es al hablar, exponer un tema, o dirigirse a un grupo masivo de personas, en el cual o logras hablar pero muy bajo el volumen de voz, o terminas sudando frío, o muchas veces te desmayas.

jueves, 7 de noviembre de 2013

El mejor momento

El mejor momento

Contigo me siento feliz
Cuando siento tu corazón latir
En ese momento nervioso
En el que me ahogo
En el no saber que decir
Y veo mi muerte venir.

Ingreso en un gran mundo
Donde todo lo que parece oscuro
Luego se convierte en hermoso
Donde veo tus ojos luminosos
Mirar de un lado a otro


Un mundo lleno de felicidad
Que es muy corto y real
Donde mi sonrisa se dibuja
Por un momento
Cuando te recuerdo
En los peores momentos
En que todo se ve lento.

Quisiera que durara siempre
Donde la felicidad se une

A la tuya para siempre